
Era el mes de diciembre, y no era un día más.
Nervios, corridas, ansiedades y muchas preguntas...
En el piso cuarto se encuentran dos rubias diputadas y se da el siguiente diálogo:
-: Vás a la sesión?
-: Sííí! Estoy emocionada...
-: Claro, lo que no se es que hay que llevar, vos sabés?
-: No, a mí nadie me dijo nada!
Todo esto mientras estaban en el ascensor, y al llegar a la Planta Baja, ambas rubias interrogan a una empleada de la siguiente manera:
-: Disculpá! ¿Sabés dónde queda el recinto?
...
Y luego encontraron el recinto y votaron, y votaran leyes!
2 comentarios:
Ay dios, que triste estar gobernados por esta gente, mama mía!
Saludos
No Diego, estas dos nos nos gobiernan, legislan. Pero dales tiempo!!!!
Dios salve a los muchachos triste de las rubias hermosas!!!
Publicar un comentario