
Pero Macri prefiere otra vez un criterio de caja. Firmó convenios con universidades privadas, según los cuales éstas le abonaran a la Ciudad por cada residente que sea tomado en los hospitales públicos de la Ciudad. Ello redundará en que será más beneficioso del punto de vista económico que los residentes pertenezcan a universidades privadas, relegando a los estudiantes de la UBA. Macri, de esta manera, privatiza las residencias y boicotea a la UBA.
El eslogan de esta política de boicot a la Universidad Pública debería decir: “Estamos haciendo que haya menos lugares para la UBA en los hospitales públicos”. Y firma: “Vendiendo Buenos Aires. Gobierno de la Ciudad”. Así lo pensaron los estudiantes de medicina...
SAY NO MORE.
4 comentarios:
pero che! tanto lío con eso de la UBA!!! queremos una buenos aires con otra onda, con chicos bien y lindas chicas atendiendo en los hospitales, no es para tanto
La UBA es re grasa...
Bueno miremos el lado positivo: "éstos nuevos residentes tendrán la oportunidad de tratar con verdaderos enfermos y no con señoras gordas con síndrome de "me falta la chica".
hoy abri un blog y hable de esto mismo..saludos
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